¡¡Muy buenas a todos, si es que todavía queda alguien por ahí que se asome de vez en cuando a esta inmundicia!! ¡¡Hoy me he decidido a quitarle el polvo al blog que acumula ya bastante!!
El tema de hoy es el siguiente, los videocurriculums. Dudo que esta palabra de nuevo cuño entre alguna vez a formar parte del corpus del léxico del español, pero bueno se entiende bien a las claras los que significa. Es grabar tu propio curriculum en video, donde además de verte la cara y comprobar si todo lo que dices en él es cierto, observan tus movimientos, tus reacciones ante lo inesperado… En definitiva, que es una herramienta más a disposición de las empresas para controlar, más si cabe, a sus potenciales trabajadores.
Algunos lo considerarán un avance, otros lo consideramos un atraso y algo innecesario, ¿es que acaso resultan más fiables 3 minutos de grabación de video que una entrevista personal?
Seguramente, los preseleccionados en esta prueba luego pasarán una entrevista, por tanto, algunos pensaréis que mi razonamiento anterior no se sostiene, pero quizá deberiamos preguntar a los que tienen un físico difícil de mirar si están de acuerdo o no. Ya nos podemos olvidar los rellenitos de mucho puestos sólo por nuestra imagen. ¡¡VIVAN LAS MERCEDES DE LAS ERAS TECNOLÓGICAS Y ESOS CEREBROS QUE NO HACEN SINO INVENTAR ARTIMAÑAS PARA DAR POR CULO!!
Por otro lado, no es nuevo el éxito masivo de las redes sociales por todos conocidas, los Facebook, Tuenty, WAYN, MySpace… de turno, en cuyas páginas todos y cada uno de los miembros trata de demostrar al grupo lo actual que es, lo modernito que es, lo enrollado, fiestero, buen amigo… y un montón de mentiras más que no es, con las que no pretende otra cosa que tratar de ocultar su patética existencia tras un velo de falsa felicidad en un intento desesperado de darle un sentido a su vida.
Bueno, pues estas redes sociales son un arma de doble filo, porque al intentar demostrar todos lo majetes que son, cuelgan más de una foto en situaciones “comprometidas” (y digo comprometida en el sentido de que muchas empresas no quieren contratar a una persona que no tiene ningun reparo en emborracharse, liarla en público… y otras cosas que la doble moral que aplican no puede tolerar, en aras del decoro y el buen nombre de la entidad). Así le estamos dando nosotros mismos la razón por la que debemos ser contratados. Por tanto, cuidadito con las redes sociales.
Evidentemente, el riesgo de ser pillado en alguna situación no deseable que impida nuestra contratación es muy pequeña, pero ahí está y hay que tenerla en cuenta, bajo mi modesto punto de vista.
Eso es todo, esta entrada ha sido a modo informativo. Está claro que las redes sociales pueden proporcionarnos momentos muy gradables, pero no debemos dejar de observar los perjuicios que puede acarrearnos.
¡!Ala, hasta el mes que viene o por ahí!! Jajaja
Recomendación: La Corporación documental de Mark Achbar y Jennifer Abbott. Podéis ver la primera parte en el siguiente enlace: http://www.megavideo.com/?v=48IEDNP4
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Hace 8 años
